“Este oficio de elaborar los alimentos y venderlos en la vía pública es uno de los trabajos más dignos que hay, por el cual vive y se beneficia mucha gente, porque ofrece una alternativa que es barata y nutritiva. Yo creo que para que las mujeres tengan más fuerza deben asociarse formalmente. Y por supuesto cuenten con todo el apoyo de nosotros como FAO, porque nuestra misión es erradicar el hambre y la pobreza extrema.”
Esta fue la respuesta del Consultor en Inocuidad y Calidad de los Alimentos de la Oficina Regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO en su sigla en inglés), Rodolfo River al ser consultado acerca del proyecto que lideran las mujeres feriantes, en donde están cambiando el rostro de la tradicional manera de vender las frutas y verduras. Esto es, con envases transportables, cuyo contenido viene prepicado, sanitizado y sellado al vacio -para preservar las características nutritivas de cada producto-. Después del proceso de elaboración el cliente sólo debe consumirlo y/o cocinarlo.
Para Rivers el proyecto de Centros de Producción Alimentos Saludable (CEPAS), apoyado por Innova Chile Corfo y ejecutado por ASOF , es completamente viable y sostenible en el tiempo, toda vez que cuenten con el apoyo de las distintos organismos involucrados en éste. Entre ellos las municipalidades y las distintas seremias. A su juicio los inspectores que representan a cada uno de estos organismos “debieran capacitarse en manipulación de alimentos en conjunto con las mujeres feriantes porque creemos que todo debe estar vinculado” dijo.
En este sentido, “FAO fomenta la capacitación de los inspectores con una visión de los alimentos que se preparan y venden en la vía pública, exceptuando a quienes inspeccionan los locales establecidos, cuyo enfoque totalmente distinto” indicó.
La experiencia de Rivers, capacitando a manipuladoras de alimentos, le indica que es primordial trabajar con los inspectores desde el comienzo de cualquier proyecto que pretenda llegar a su objetivo. “por qué no, si el inspector no tiene porque ser un ente castigador, que saca una multa al final de la cadena. Debe ser un aporte en los emprendimientos ” señaló.
De hecho es tan viable que, cuenta que han realizado capacitaciones a solicitud de algunos municipios. “Hemos tenido a los líderes de las comunidades, trabajan en estos procesos y los hemos vinculados con municipio, con la seremi, con los inspectores. Es un trabajo muy sano, porque todos los actores se ven las caras desde antes y sacan adelante un proyecto, pensando en el bien común”.
Mujer y su rol
Para el Consultor FAO la mujer desde siempre ha jugado un rol fundamental en la sociedad chilena, en América latina y el Caribe. “Creo que el darles valor y decirles que lo que ellas hacen implica que en sus manos está la responsabilidad de la salud de cientos de personas es fundamental para que sientan que su labor es reconocida y valiosa para mantener una dieta nutritiva y variada” concluyó.