Santiago, 14 de julio de 2014.- Vincular a comerciantes de ferias libres de Maipú, Padre Hurtado y Melipilla con vecinos de estas comunas, mediante la capacitación en el cultivo natural y ecológico de hortalizas y plantas medicinales, para su posterior venta en ferias libres, es el principal objetivo del proyecto “Ecopuestos, prooviendo el Comercio Sano y Ecológico”.
La iniciativa, que será ejecutada por la Confederación de Ferias Libres (ASOF C.G) y financiada por el FOSIS, propone apoyar a 54 pequeños emprendimientos de productos sanos para que las familias mejoren sus ingresos y calidad de vida.
Este lunes 14 de julio, dirigentes de la ASOF, representantes del FOSIS, vecinos, feriantes y responsables del proyecto, dieron a conocer las bases de lo que será esta interesante idea, que propone la generación de huertos urbanos y ecopuestos en ferias libres, en los cuales se ofertarán alimentos cultivados en forma natural y ecológica por familias de las localidades cercanas a las ferias.
El Subdirector de Programas del FOSIS, Cristián Troncoso, valoró la iniciativa en lo que respecta al trabajo local o territorial, “porque nace desde los vecinos y de un grupo de pobladores y que tiene como tarea fortalecer el tejido social de su entorno. Interesante destacar el cómo desde la propia comunidad surgen iniciativas que buscan establecer un vaso comunicante permanente entre comerciantes de ferias libres y la comunidad, fortaleciendo al mismo tiempo el circuito de comercialización”.
Gabriela Sepúlveda, Secretaria Nacional de ASOF, destacó la importancia de aumentar la oferta de alimentación saludable, sobre todo en las ciudades modernas, en las cuales “existe un déficit alimentario que FAO ha llamado desiertos alimentarios, ya que encontramos más comida chatarra que verduras frescas y este proyecto es un ejemplo de cómo enfrentar esta realidad”.
René Cifuentes, ingeniero comercial a cargo del proyecto de ASOF, comentó- además- que el proyecto emerge frente a escasas iniciativas de productores desarrolladas en sectores vulnerables que fomenten la vida sana en las comunidades. “Detectamos problemáticas que nos hicieron pensar en lo pertinente de llevarlo a cabo, como los altos índices de obesidad existentes debido a una mala alimentación, las dificultades de abastecimiento de productos frescos y sanos; suelos agrícolas que se urbanizan frente a la reducción de las plantaciones en zonas urbanas y periurbanas, entre otros aspectos”.
Las ferias libres son consideradas el último bastión de comercialización de productos saludables al alcance de los sectores más vulnerables y una salida a la producción agrícola urbana y periurbana.
54 beneficiarios directos: feriantes y comunidad
Se contempla capacitar a vecinos y feriantes, a través de talleres teóricos y prácticos orientados a los 54 beneficiarios, en áreas de negocios y técnicas agrícolas para levantar huertos urbanos (pequeños), que puedan ser instalados en las mismas casas de los vecinos o pequeños terrenos, cercanos a las ferias, donde posteriormente se dispondrá la oferta a la comunidad. Son alimentos cultivados en forma controlada, libres de cualquier contaminación, su producción no es a gran escala, pero permitirá abastecer normalmente a los comerciantes integrados. Entre los vegetales cultivados sin fertlizantes químicos ni plaguicidas, que podrán estar disponibles en los ecopuestos, están: el tomate cherry, cebollín morado, ciboulette, rocoto, merquén, ajos, cebollas moradas,rúculas y variedad de hierbas medicinales, por mencionar sólo algunos.
Desde la mirada comercial, el objeto es que los emprendimientos se sustenten en el tiempo, razón por la que ya se están gestando formas de asociatividad entre los participantes como cooperativas.
De los 54 beneficiarios, 18 son comerciantes de ferias libres y 36 familias que son parte de la comunidad circundante, quienes están incorporando en sus futuros emprendimientos procedimientos sobre reciclaje orgánico, como el compostaje para posterior elaboración de abono y los productos de la lombricultura. Este es un desafío para las ferias libres ya que según estudio- realizado con apoyo del Consejo de Producción Limpia, la ASOF y ONG Espacio y Fomento-, – sólo en la R.M- se emiten al menos 70 mil toneladas de residuos orgánicos anuales, y casi todo este material va directo al vertedero.
La agrónoma de ASOF, Paulina Rivera, encargada de capacitar a los beneficiarios, enfatiza en que “se les enseñará a producir sin químicos en la tierra y a combatir las plagas sin químicos, por tanto, se generará suelo orgánico a partir del reciclaje de residuos orgánicos y se manejarán las plagas con preparados naturales. Así, los vegetales a ofertar en los ecopuestos de la feria, serán efectivamente alimentos sanos, sabrosos y nutritivos que crecieron y se desarrollaron de forma ecológica”.
Hierbas Medicinales Mapuche en Ferias Libres
Carmen Pilquiñir de la Feria Guayaquil de Maipú.
Carmen Pilquiñir, de la feria libre El Esfuerzo de Guayaquil de la comuna de Maipú, conversa orgullosa con un canelo cultivado en almázigo en su propia casa. Ella forma parte del proyecto FOSIS- ASOF y, hoy feliz, comenta cómo ha podido mezclar sus conocimientos ancestrales con el aprendizaje de técnicas de cultivo ecológico. Hace 6 años que trabaja en su puesto, La “Piká del Peñi”, en el que ofrece todo tipo de alimentos mapuche, aunque se ha especializado en las hierbas medicinales. Dice con certeza que en la naturaleza está todo a nuestro alcance para no enfermar. “Para el estres ertá la hierba de San Juan, para la tranquilidad la melisa, para el resfrío las hojas de nuestro sagrado árbol El Canelo, porque hace las veces de antibiótico”.
